LOA A LA GLORIOSA SANTA ANA

LOA A LA GLORIOSA SANTA ANA


Hoy, vemos la procesión
de la gloriosa Santa Ana
a quien este pueblo adora
y a su reliquia sagrada.

Que nuestros antepasados
nos dejaron con la gracia
de librar de los pedriscos
nuestras mieses enceradas.

Desde tiempo inmemorial
conocemos tu eficacia
y por ella todo el pueblo
hoy te bendice y te alaba.

Y todo este vecindario
que por las calles y plazas
te acompaña en procesión
rindiéndole a Dios mil gracias
por tan grandes beneficios
y por mercedes tan altas,
se postra ante Ti, de nuevo
pidiéndote en sus plegarias
que le sigas protegiendo
¡Oh! ¡Poderosa abogada!

A Ti, con todo fervor,
me dirijo esta mañana,
a expresarte los afectos
que a todo este pueblo embargan.

El pueblo de Galinduste
tiene en Ti su confianza
y te conoce por Reina
de sus campos de labranza.

Cuando empiezan los calores,
las tormentas se preparan,
amenazando dejar
nuestras mieses arrasadas.

Mas, saliendo tu reliquia,
esparciese sin tardanza,
los temerosos nublados,
y viene calma y bonanza.

Gloria al noble pastorcillo
que vino de tierra rasa,
poseéis esta reliquia
para su defensa y guarda.

Y después vino a este pueblo,
nos la dejó encomendada.
Y al morir mandó se hiciera
esta gran fiesta a Santa Ana.

Cerca de Jerusalén
existe una santa casa,
y afirma la tradición
que en ella habitó Santa Ana.

Allí, sus restos sagrados
en un sepulcro descansan
y de allí algún peregrino,
trajo esta reliquia a España.

Madre de la Virgen Santa,
Reina de las Jerarquías,
hermosa fuente sellada,
fuerte de vuestra defensa
y de este pueblo, atalaya.

Yo, no puedo proseguir,
ni a explicarme más me atrevo,
que es poca mi inteligencia
para tan alto misterio.

Y yo, no os puedo ensalzar,
como merecéis, gran Santa.
Que os ensalcen los poetas
de dotes más elevadas.

Bendice al noble auditorio
que en unión os acompaña
y ruego que disimules,
y que perdones mis faltas.

Autor: José Martín Sánchez “Sr. Pepín”